En estos días estivales que
invitan a las reuniones frecuentes de amigos y familiares en torno a la mesa, más
de uno se encuentra en una situación comprometida al no saber como comportarse
en la mesa.
Terminado el curso donde las
comidas muchas veces son precipitadas o en la estricta intimidad lo que hace
que se relajen las buenas costumbres, es cuando el fenómeno social de comer en
compañía se produce, ¡horror! ni reconozco
los cubiertos, ¿que hago con la servilleta?, ¿debo de comer mascando
como el de enfrente?... y muchas más cuestiones en las que ni reparamos, pero a
veces si nuestros acompañantes. Por eso mis queridos lectores os daré unas
sencillas normas, para salir airosos de estas situaciones.
En las que lo importante es
hacerlo bien aunque los demás ni se percaten.
DECÁLOGO DE LAS BUENAS MANERAS EN
LA MESA
1º Sentarse erguido, la espalda
pegada al respaldo de la silla, fuera los codos de la mesa, nada de las
posturas de estudiar que para ello estamos de vacaciones…
2º No jugar con los cubiertos ni con otros
objetos de la mesa, hasta que nos sirven
o pasan la comida.
3º No empezar a comer hasta que
nos e acabe de servir toda la mesa, y en algunas familias según la costumbre se
bendiga la mesa.
4º No hablar con la boca llena o
masticando esto unido a masticar con la boca cerrada y nunca enseñar la comida.
5º La comida va a la boca, no la
boca a la comida, se acabaron las posturas de ganado pastando en el prado.
6º No llevar nunca el cuchillo o
la pala de pescado (que existe aunque algunos no la conozcan) a la boca, este
es un error muy frecuente y sobre todo cuando se toma la fruta.
7º Antes y después de beber
limpiarse la boca con la servilleta que antes de comenzar a comer nos hemos
colocado en las piernas.
8º No sacar nunca los cubiertos del plato,
aunque estemos entre plato y plato o descansando, lo único que debemos sacar es
la cucharilla de la taza de café o leche cuando nos dispongamos a beber, cosa
que también se olvida con facilidad y tampoco utilizar los propios cubiertos para
servir de fuentes comunes o ensaladas.
9º Al comer no arrastrar con los
dientes la comida si no con los labios y
siembre con la boca cerrada e importantísimo no sorber sopas, ni cremas. El pan
se come partiéndolo en pequeños trozos, nunca se muerde (no es la hora del
bocata).
10 º Estar siempre pendiente de
las necesidades de la mesa, por ejemplo de si se acaba el pan o el agua,
reponerlos si esta en nuestras manos, o adelantarnos a las necesidades de
alguno de nuestros compañeros, esto si es verdaderamente costoso pues a veces solo estamos para disfrutar de la comida, de la
conversación y nos olvidamos que la mesa también es una bonita manera de servir
a los demás, ayudar a los otros a que disfruten, esto es lo que se podría
llamar vivir “el voluntariado en la mesa”.
Parece que son muchas
indicaciones, pero si las pensáis son de sentido común, no dejemos que estos
buenos hábitos entren también en crisis o se olviden.
Es importante saberse mover
en cualquier ambiente, dar ejemplo de
saber estar, no penséis que esto es cursi o pasado de moda.
Finalmente inserto un esquema de
cómo debe colocarse una mesa completa, como la que nos encontramos en
celebraciones y ceremonias tan propias de este tiempo, parece que nos vamos
a liar con todo el menaje pero si
sabemos para que es cada cosa todo es más sencillo, solo una pequeña aclaración
con los cubiertos e postre, para sólidos se utilizará la cuchara a veces nos
puede ayudar el tenedor que se sujeta con la mano izquierda a empujar y el
tenedor y el cuchillo solo para la fruta.
Mucho ánimo, que todo es más
sencillo de lo que parece, y estoy dispuesta a contestaros cualquier consulta
que tengáis.
Con cariño.
Sra. Waldorf